Como todos los años, muchos se hacen propuestas de cambio. Nuestros alumnos también; estudiar más, obedecer a la primera, mejorar la comunicación con la familia, ... Y como no, los adultos también nos hacemos propósitos de cambio y de mejora, pero en ocasiones, o no lo conseguimos o nos quedamos a medias.
Este post lo dedico a dar pistas sobre cómo conseguirlo. La primera pista es estar convencido. La segunda es ser realistas. La tercera es ser perseverantes y la cuarta; revisar periódicamente los propósitos de mejora.
También hay que señalar que en ocasiones el cambio da miedo, desconfianza y he ahí una de las razones principales del fracaso. No estábamos preparados para dar el salto. A continuación os dejo un vídeo sobre cómo afrontar psicológicamente un cambio.
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